CATEM: combatiría la corrupción, pero la adoptó

+ CATEM: combatiría la corrupción, pero la adoptó; exdiputada local cuestionada por extorsión laboral; “El pato” de Lucas bajo la amenaza de las rejas; felices, los trabajadores del STIRTT

Agustín Rodríguez L.

GUAYMAS, Son. – La autoridad federal respondió en forma contundente a la demanda de grupos empresariales en La Laguna, al detener a una banda de extorsionadores y presuntos narcos, capturando a su líder, el apodado “El limones”.

La repercusión creció al saberse que el Edgar, el presunto cabecilla del grupo criminal y cuyo apellido debe omitirse por obligación legal, era dirigente en esa región, de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México, la CATEM, ese grupo fortalecido al amparo del morenismo lopezobradorista y su 4T que, en teoría, acabaría con los arraigados vicios en el viejo sindicalismo.

No. Fue peor, dicen muchos. “El limones” es ejemplo de lo que estaría sucediendo en el país y Sonora no sería excepción, al conocerse denuncias de empresarios contra lideresas sindicales que promover huelgas sin respaldo real de trabajadores y exigen pagos ilegales, con un esquema similar al creado por Edgar, para lavar dinero en Durango y Coahuila.

La CATEM y su oscuro líder, el millonariazo Pedro Haces, están en la denuncia de 20 empresarios que revelan la práctica ilícita replicada en Sonora, que afecta industrias como la manufactura, exportación, servicios y comercio, pues fomenta la extorsión bajo el amparo del nuevo modelo laboral. Señalamientos directos alcanzan a liderazgos sonorenses, en particular a Carolina “Carito” Lara Moreno, Marisela Parra Martínez y Brenda Esquer Palma.

Por supuesto que los denunciantes prefieren el anonimato, pues no es fácil exponerse ante el hampa organizada y el riesgo implícito en denunciar pillos y sus pillerías. Las damas en cuestión estarían ejecutando un modus operandi que, insistieron los hombres de empresa, usa fraudulentamente el nuevo modelo laboral y obstaculizan la operación de empresas formales, la estabilidad laboral y la inversión en la entidad.

“Carito” funge como secretaria general de la CATEM Sonora y fue diputada local por el PAN, luego dirigente de Fuerza por México y hoy sería de las principales operadoras del esquema, pero de antemano aclaran los empresarios, sus trabajadores no reconocen a estas lideresas ni respaldan a sindicato alguno de esa central. Ni las conocen ni se han afiliado.

Marisela Parra se presenta como operativa sindical y encabeza negociaciones con los empresarios, hasta llegar a presión económica para no ver cumplida la amenaza de emplazamientos laborales, exigencias de pagos mensuales o cobro específico a cambio de “desistirse” de la huelga.

Hay más, pero eso es sabido y el espacio es corto. Solo un ejemplo para ilustrar lo que ocurre: la preocupación por estas prácticas está centrada en Nogales, “un punto estratégico para el comercio exterior y la industria maquiladora”.

Allí parte, y se extiende por otras regiones tal cual ocurrió en Coahuila y Durango, hasta crecer un monstruo cuyo freno debió surgir de la propia Presidencia de la República y crear una fuerza de tarea federal conjunta, para atajar de raíz algo que ya amenazaba a la actividad económica en general. Y a la seguridad pública misma.

Como señala la denuncia empresarial ya expuesta en medios como Proceso, “Sonora no es la excepción. Es el mismo libreto, emplazamientos masivos, amenazas veladas y cobros ilegales”.

La sintomática sugiere un operativo similar en Sonora, para frenar una acción coordinada para delinquir. Involucraría a la Unidad de Inteligencia Financiera como base para hacer actuar a la Secretaría de Seguridad Pública, el Ejército y la Guardia Nacional, en los operativos que detendrán esos delitos que ayudan a fortalecer la base financiera de la delincuencia.

En Durango, “El limones”, multiseñalado desde hace años como socio de Pedro Haces, cabeza de la Catem, cobraba a ganaderos entre 80 centavos y un peso por kilo de ganado vivo; desplazaban a otros sindicatos, amenazaban para agandallarse contratos de obras públicas y privadas, etc.

Malamente el titular de Seguridad Ciudadana en el país y hombre de moda al grado de hacerlo presidenciable para 2030, Omar García Harfuch, aseguró que Pedro Haces Barba no tiene relación con “El Limones”, pese a la opinión general de la gente, aunque en descargo de su figura de justiciero, afirma que aún se investiga.

“CARITO” LO NIEGA

La líder de CATEM en Sonora, Carolina Lara, identificada como “Carito” cuando fue diputada local entre 2012 y 2015, dice que su líder Pedro Haces es un visionario y elogia a la organización.

Claro que negó las extorsiones señaladas por empresarios en Sonora y se dice difamada al pedir no permitir acusaciones y señalamientos desde el anonimato: “como representante de la Catem en Sonora, niego rotundamente cualquier acto de extorsión de ningún tipo», subrayó, y dará la cara para defender los derechos de los trabajadores “sin afectar a empresarios ni fuentes de empleo”.

Negó crédito a las versiones de chantaje y simulaciones sindicales que pervirtieron la reforma laboral vigente desde 2019, esas que fortalecerían la democracia sindical, pero se utiliza para diseñar medios de presión económica típicos de la corrupción que esa organización acusaba existente y pretendía desaparecer.

Las denuncias presentadas ante autoridades federales se analizan y se esperan acciones que harían escándalo, pero confirmarían el combate a la extorsión, hoy una prioridad del país.

EL PATO BAJO PROCESO Y SE AMPARA

Ernesto “El pato” de Lucas Hopkins, exsecretario de Educación estatal con Claudia Pavlovich, fue formalmente vinculado a proceso, pero un amparo impide que vaya a hacer compañía a su “sub” de entonces, el empalmense José Víctor Guerrero, quien “paga el pato” de los pecados cometidos por el ídem.

De Lucas hizo lo que aprendió a ser como servidor público, de donde siempre sale señalado por dedos flamígeros. Esta vez habría saqueado casi 290 millones de pesos del presupuesto de los sonorenses.

Dicen que al “Pato” le preguntaron cómo se declaraba y, claro, dijo que inocente. Las risitas que eso genera son un gran indicador. Luego cuestionaba si estaba su firma en los documentos aprobatorios de los desvíos, a cuya negativa, igual, cuestionó con un ¿entonces?

Pues sí. No hay como el cinismo para tratar de ocultar como mastican las iguanas en las oficinas públicas, donde la firma involucra a terceros, aunque los dineros se reflejen en las cuentas y posesiones de los primeros y quienes estuvieron detrás de sus nombramientos.

El pueblo no cree en la inocencia de Lucas. Ni en la del extitular de Hacienda, Raúl Navarro Gallegos, quien abrió la puerta a las mañosadas del ahora perseguido magdalenense. A ver hasta donde los abogados le resuelven el chistecito, como llaman los políticos a sus casos, donde no siempre la ley se impone. Bueno, sí, la del más fuerte e involucra recursos materiales y políticos de alguien que los tenga en abundancia.

Tampoco se cree en la persecución apegada a le ley. Más bien se sospecha de golpe político a quien difícilmente puede llamarse inocente, para sacarlo del juego electoral de 2027.

FELICES, EN EL STIRTT

Donde sí se cumple la meta representativa a favor de los trabajadores, es en el STIRTT.

Se llevó las palmas el dirigente seccional Ricardo González Palacios, al reunir a su gente en su festejo decembrino y entregar el fondo de ahorro y otras acciones favorables al sector.

Bien por la raza de radio, televisión y telecomunicaciones, que disfrutaron sabiendo que con cobijados por una buena dirigencia nacional y local.